Marijo, nos escribe y nos adjunta una carta publicada en la edición del 18/09/07 del Diario de Navarra.
Derecho a la educación sin discriminación
Todos los que somos padres nos podemos encontrar en cualquier momento con que alguno de nuestros hijos tenga un problema de aprendizaje: dislexia, disgrafía, TDAH, etc. Entonces el derecho a la educación que tenemos todos se presenta como una carrera de obstáculos. Porque aunque las Administraciones educativas deberían garantizar los procedimientos y recursos precisos para identificar tempranamente las necesidades educativas específicas derivadas de las dificultades de aprendizaje, así como el apoyo educativo para la atención del alumnado con dificultades de aprendizaje desde el mismo momento en que dicha necesidad sea identificada y con la normalización educativa como finalidad, la realidad nos ofrece unas aulas demasiado masificadas, con muchos niños con necesidades educativas especiales y unos profesores que no cuentan con más recursos que su vocación, profesionalidad y el deseo de hacerlo lo mejor posible, intentando dar a cada niño lo que le corresponde, algo que realmente es complicado.
Mientras tanto hay muchas familias que sufren, normalmente en silencio, porque el fracaso escolar es lo que llega cuando por falta de apoyos no se puede llegar a la normalización educativa, mención aparte de lo que supone para un niño defraudar a todos, profesores, padres, etc.… al no llegar a las metas que le marcan y con el consiguiente deterioro emocional, baja autoestima y repercusión en las relaciones con su entorno. Ante esta falta de recursos a las familias no nos queda otra opción que acudir a la vía privada para que nuestros hijos sean valorados, diagnosticados y tratados, teniendo que asumir un coste nada despreciable, prolongando la jornada escolar y para recibir una atención que debería darse en el mismo colegio y dentro del horario escolar. Existen unas becas para cubrir estos gastos privados que tengo la suerte de no poder solicitar, y digo la suerte porque mis ingresos son superiores a los requeridos para poder solicitarla, y en caso contrario lo que no podría es llevar a mi hijo a un centro privado.
¿Son éstos todos los recursos que podemos ofrecer a los niños con necesidades educativas especiales? ¿Serían suficientes para tu hijo si tuviera problemas de aprendizaje?
Mientras tanto hay muchas familias que sufren, normalmente en silencio, porque el fracaso escolar es lo que llega cuando por falta de apoyos no se puede llegar a la normalización educativa, mención aparte de lo que supone para un niño defraudar a todos, profesores, padres, etc.… al no llegar a las metas que le marcan y con el consiguiente deterioro emocional, baja autoestima y repercusión en las relaciones con su entorno. Ante esta falta de recursos a las familias no nos queda otra opción que acudir a la vía privada para que nuestros hijos sean valorados, diagnosticados y tratados, teniendo que asumir un coste nada despreciable, prolongando la jornada escolar y para recibir una atención que debería darse en el mismo colegio y dentro del horario escolar. Existen unas becas para cubrir estos gastos privados que tengo la suerte de no poder solicitar, y digo la suerte porque mis ingresos son superiores a los requeridos para poder solicitarla, y en caso contrario lo que no podría es llevar a mi hijo a un centro privado.
¿Son éstos todos los recursos que podemos ofrecer a los niños con necesidades educativas especiales? ¿Serían suficientes para tu hijo si tuviera problemas de aprendizaje?
1 comentario:
muchas gracias por su comentario!
su blog me parecio muy interesante y es por eso que asigne un link a ustedes en mi blog
ya que creo necesario darse cuenta de la vision que tienen otros paises sobre las capacidades diversas con las que vivimos hoy!
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